las mejores tapas de estilo y el glamour como plato principal, ¡atendido por su dueña!


BEST STYLE APPETIZERS AND GLAMOUR AS A MAIN COURSE, ATTENDED BY THE OWNER!

22 de agosto de 2010

Rosa de Verano


Uff, si no fuera por la insistencia de mi amiga Catty Casanova, me hubiese perdido del (literalmente) ardiente Verano Suite que se vivió esta noche en 360º Roof Bar. Este fin de semana de verdad que fue intenso, especialmente anoche que tuve una pijama party con mi Mamota Team hasta las "15" de la mañana. Con mi hermosa cayena rosa de cuero envuelta en la cabeza -que adquirí ayer en Boutique Emergente- me motivé a asistir a esta segunda cita con la moda venezolana. Apenas llegué, me conseguí a mis fabulosos colegas del periodismo de moda José Roberto Coppola (Todo en Domingo) y Leonardo Martínez (Velvet Magazine), quienes me presentaron a Rosa Gubaira, una de las concursantes a Chica E! Venezuela y a quien AnaBo ya había preferido pocos días antes luego de escucharla en una entrevista con Titina Penzini.

Por supuesto que se lo dije, con toda la naturalidad que me distingue y, para mi sorpresa, recibí de vuelta una cálida, divertida y amena conversación con la bella candidata. Más que todo estuvimos hablando de nuestros viajes a Europa (su hermano vive en Valencia, España, y siempre viaja en esta época para visitarlo); de nuestros gustos por la moda y nuestros proyectos en el medio. Con un abrazo nos deseamos éxito y me despedí con la clara convicción de que esta chica será más que E!

Ah! Se me olvidaba comentarles lo más importante: los diseñadores de Verano Suite. Realmente no vi muchas cosas que me impresionaran tanto como ayer en Boutique Emergente, sobretodo la nueva línea de accesorios de las hermanas Braun, me pareció más de lo mismo. Lo que realmente me gustó fueron las prendas de vestir de Columpio (los jumpsuite son de muerte); las sandalias psicodélicas de Carol de la Torre y los pintorescos cojines de Koukou Design, que estaban regalando unos mini cojines de llavero demasiado cuchis.

Veremos de qué me enamoro en el próximo bazar. Valió la pena regresar...

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